Nace en Cárdenas, Matanzas, el tenor cómico PEDRITO FERNÁNDEZ.
Intérprete del repertorio lírico español y cubano. Muy vinculado a la obra de Lecuona desde su debut —un pequeño papel en el estreno de Lola Cruz (1935)—, interpretó los personajes de «negrito» en todas sus obras y lo acompañó en varias de sus giras internacionales, principalmente, las de los estrenos de María la O y El cafetal en el teatro Álvarez Quintero, de Madrid (1953).
En 1947 integró el elenco de la compañía de zarzuelas españolas de Moreno Torroba, presentada en el teatro Nacional, de La Habana (actual sala García Lorca del Gran Teatro de La Habana).
Realizó las funciones de segundo apunte en la puesta de Doña Francisquita, de Vives, dirigida por Antonio Palacios, en el teatro Payret (1961). Integra el Teatro Lírico Nacional de Cuba en 1967.
Dirige e interpreta el Cándido en La revoltosa (1967), el Niegus en La viuda alegre (1967), el Aníbal en Luisa Fernanda (1968).
También interviene en La leyenda del beso (1968), dirigida por Centeno, donde interpreta el Gorón.
Actúa en el grupo Jorge Anckermann, del teatro Martí y trabaja como director de escena para el Teatro Lírico de Matanzas.
Un año antes de su muerte, realiza una puesta en escena de la zarzuela El batey, de Lecuona, para el Teatro Lírico Nacional de Cuba.
Murió en La Habana el 19 de agosto de 1998.