Héroe de la resistencia popular contra los ingleses en 1762, conocido por la historia como Pepe Antonio. Regidor, alcalde mayor de Guanabacoa, desde 1748 hasta 1762.
Sobre su vida sabemos poco. Incluso, las fuentes se contradicen sobre su nombre. La tradición quiere que le llamemos José Antonio Gómez Bullones, pero algunas fuentes señalan que Antonio era su primer apellido. Tampoco hay claridad sobre la fecha de su nacimiento y aunque la tradición, con el consenso general de los historiadores, indica que nació en Guanabacoa el 10 de diciembre de 1707, algunas fuentes afirman que fue en 1704.
En 1727 se inscribió en las Milicias de su pueblo. Rápidamente le ascendieron a capitán 1732 y hasta 1748 asumió la defensa costera del norte de la actual provincia habanera, al este de la capital cubana, entre las localidades de Cojímar y Jaruco.
Ocurrió como parte de la Guerra de los Siete Años. Cuando los ingleses desembarcaron en el litoral habanero, el 7 de junio de 1762, Pepe Antonio organizó una partida de 70 hombres, para enfrentar a los invasores. Dicen que al frente de su tropa cargó al machete contra los ingleses, prefigurando las hombradías que en el siglo siguiente harían Máximo Gómez y Antonio Maceo.
Los documentos de la época abundan sobre sus andanzas. Del 7 al 13 de junio sostuvo varios combates contra los invasores, a quienes tomó más de medio centenar de prisioneros. El día 18, atacó un campamento enemigo y le ocasionó varios muertos; el 23, a una patrulla provocando numerosas bajas.
Según algunos investigadores, en mes y medio de lucha ocasionó más de 300 bajas a los ingleses y les tomó más de 200 prisioneros. Cuenta la leyenda que lleno de envidia, el inepto y soberbio coronel español Francisco Caro, destituyó del mando a Pepe Antonio.
El guanabacoense, afirma la tradición oral, falleció el 26 de julio de 1762, a causa del disgusto que le causó tal injusta medida.
Días después, las autoridades españolas se rindieron a los ingleses y estos pudieron entrar victoriosos en La Habana. Un año más tarde, España restablecía su control sobre la capital de Cuba.
Pero ya comenzaban a evidenciarse las diferencias entre los españoles y los criollos insulares, quienes poco a poco se estaban transformando en cubanos y pronto comprenderían que su destino era fundar en esta tierra una nación libre y soberana.
Trascendencia
Su nombre, Pepe Antonio, es en Cuba sinónimo de libertad, valentía, amor al suelo patrio. Defensor inclaudicable de la integridad nacional, ha devenido leyenda a través de los siglos.
Su caso no es el del mítico Robin Hood inglés; no hay duda alguna de que existió realmente, los documentos de la época le describen como el regidor alcalde mayor de Guanabacoa, en las afueras de La Habana, y mencionan con reiteración sus andanzas y hazañas. Con los aportes de cada nueva generación, la imaginería popular lo ha ido transformando en una especie de Guillermo Tell cubano, el Cid campeador de las Antillas. Por ello, para el historiador y el estudioso se hace cada vez más difícil separar, en su caso, el mito de la realidad.
Lo cierto es que Pepe Antonio, héroe de la resistencia popular contra los ingleses en 1762 y paradigma de nuestro pueblo en la lucha contra cualquier invasor, vivió en una época en que aún los cubanos no constituían una nacionalidad.
Curiosidades
En el Muséo Histórico de Guanabacoa se guarda como la pieza más valiosa el machete utilizado en 1762 por el popular héroe Pepe Antonio, a quien se le recuerda como el primer guerrillero cubano, que tuvo a su cargo al contraataque y resistencia de la ciudad cuando la Toma de La Habana por los Ingleses.
A Pepe Antonio se le menciona en una estrofa del Himno de Guanabacoa.
Fuente: Ecured