Rubén Rabasa, actor cubano que sigue triunfando en Hollywood y en las redes sociales
Rubén Rabasa, quien cumplirá 86 años en abril, cuenta que el día en que llegó a Estados Unidos, en 1955, tenía en mente otro tipo de recibimiento. «No creerías las preguntas que me hicieron: ‘¿Es usted homosexual? ¿Es usted comunista?’ Supongo que esperaba una cálida bienvenida.
Se asentó inicialmente en la ciudad de Nueva York, junto a su madre, una enfermera divorciada, y su hermano menor. Gracias a la ayuda de amigos como el actor Orestes Matacena y el también histrión y director teatral, Miguel Ponce, el joven comenzó a hacerse de un nombre dentro de la comunidad latina de la Gran Manzana y fue uno de los primeros en hacer teatro en español en las calles de la cosmopolita ciudad.
Comentó que el hecho de sumarse al The New York Theater of the Americas, bajo la tutela de Ponche, marcó un antes y un después en su carrera, pues le permitió participar en una treintena de obras hasta que le llegó su primera oportunidad en el cine con un largometraje que llevaba por nombre Badge 73.
Allí, «mi cabeza calva hizo su debut asomando por la letra ‘B’ en el secuencia del título», escribió en su web oficial. Tiempo después estaría entre los fundadores del conocido Centro Cultural Cubano en ese propio lugar.
Más adelante decidió trasladarse hacia Florida, donde buscó sentirse arropado por la enorme comunidad cubana existente allí y se abrieron nuevas oportunidades para su trabajo. Entre las películas en las que se le vio en aquellos años se cuentan Guaguasi (1983), Amigos (1985), Loca Academia de Policía 5: Operación Miami Beach (1988), y además estuvo en la exitosa serie de TV, Miami Vice, en la que intervino en dos episodios.
A partir de ahí se labró una extensa carrera, en la que ha alternado entre el séptimo arte y la pequeña pantalla -muchos recordarán sus intervenciones en el famoso espacio Sábado Gigante– y ha compartido con estrellas de la talla de John Travolta, Colin Firth, Marisa Tomei, Adam Sandler y Andy García, entre otros.
En su currículo figuran más de 70 producciones audiovisuales, entre las que destacan The Intruders, Better Things, Luces de Neón, I Think You Should Leave With Tim Robinson, Mentes Criminales, Superperdidos, Agents of S.H.I.E.L.D., La ciudad perdida y Cuando salí de Cuba.
Aún lo siguen llamando para nuevos papeles y uno de sus últimos roles en Hollywood llegó el pasado año cuando lo vimos en Ant-Man and the Wasp: Quantumania, película de superhéroes que recaudó más de 470 millones de dólares alrededor del mundo y donde Rabasa se puso sobre la piel del empleado de una cafetería que confundió a Ant-Man con Spiderman.
“Yo no sabía quién era Ant-Man. Pensé que era Spiderman porque tenía un traje rojo y azul. Entonces dije ‘Gracias, Spiderman’, sin pensar. Y resulta que eso gustó mucho al director (Peyton Reed) y lo dejó en la película», declaró en un diálogo publicado en la web de Marvel.
En 2022 estrenó una obra unipersonal en el teatro, llamada Rubenología, que resumió su carrera y se asomó a la actualidad de una vida «sui géneris» para una persona de su edad en el universo de las redes sociales. Antes del estreno, en una conversación suya con la agencia de noticias EFE se supo que Rabasa cuenta con un «social media man», un administrador de redes que maneja sus cuentas en Instagram y TikTok, en las que publica regularmente videos bailando y haciendo locuras».
En la primera de las plataformas mencionadas anteriormente acumula más de 55 mil seguidores, mientras que en la segunda tiene más de 22 mil. Sus publicaciones reciben gran cantidad de interacciones y lo mantienen cerca, sobre todo, del público joven que gran presencia tiene en esos sitios.
En una entrevista que ofreció al programa Mi hora favorita, confesó que su secreto para mantener la vitalidad es vivir en el presente. «Uso mi regla de tres: tienes que estar observando, aceptando y educándote. Eso es todo», sentenció.
A Cuba solo volvió en una ocasión: estuvo durante un mes en 1961 y prometió que no regresaría.