Pedro Natilla Jiménez, pelotero cubano. Una de las figuras emblemáticas que engrandecieron el Deporte en Cuba antes de 1959. Consagrado como lanzador, buen bateador y destacado entrenador.
Natural de Santa Cruz del Norte, sus vínculos con el béisbol fueron llevando a cantina de su casa a los trabajadores del central, escapándose en múltiples ocasiones para presenciar los juegos en el estadio. Allí lo descubrió Joaquín Viego, manager de Hershey quedándose impresionado con su físico, logrando convencerlo para que interviniera en los entrenamientos del equipo en días alternos.
Su comienzo fue receptor práctica. Al verlo tirar Viego le recomendó desempeñarse como pitcher, al admirar que poseía un abrazo respetable. Al principio era muy descontrolado, su dedicación y perseverancia lo encaminaron a plano estelares debutando el 16 de mayo de 1936.
A partir de ese momento le proporcionó a su conjunto de Hershey Sport Club 3 campeonatos seguidos en la Liga Atlética Amateur en los años 1938, 1939 y 1940.
En sus años de máximo esplendor con sus seis pies de estatura y 210 libras de peso - finales de los años 30 y década del 40- fue uno de los más distinguidos monticulistas criollos en la pelota amateur.
Fue declarado jugador más famoso en 1938, con una campaña fabulosa de 15 victorias y un revés en la serie criolla, Campeón Occidental-Central. Se impuso contra el deportivo Cárdenas tirando 3 lechadas con marcador de 3 a 0, 9 a 0 y 11 a 0, incluyendo no hit no run propinando 30 ponches.
Como atleta sus principales atributos eran una tremenda velocidad y un curvón muy pronunciado hacia abajo, su lanzamiento predilecto para salir adelante en los momentos decisivos con coraje y valor impresionantes.
Posteriormante a partir de 1962 se destacó como avezado técnico, entrenador, scout y director de equipos. Trabajó principalmente en Oriente y Las Villas, donde fue mayor su legado. En esa antigua provincia del centro de Cuba dirigió equipos y estuvo al lado -asesorando y enseñándole su sabiduría- del novato director de 21 años Servio Tulio Borges, tanto en Azucareros como en el Team Cuba hasta 1972. Fue el descubridor y mejor entrenador de varios destacados monticulistas y peloteros, entre ellos José Antonio Huelga y Antonio Muñoz, quienes en determinado momento se convirtieron en el mejor lanzador y bateador del Béisbol en Cuba.
Proveniencia del apodo
Su apodo Natilla proviene de su padre, el cual en un descarrilo ferroviario, cuando no había almuerzo, se comió aproximadamente 19 raciones de natilla, pesaba 256 libras, con un genio soberbio, a escondida sus compañeros le pusieron Natillón y a su hijo Natilla, para posterioridad archivo balance de 79 triunfos.
Interviene representando a Cuba en cuatro mundiales amateurs 1939-1943 y en unos Juegos Centroamericanos Panamá 1938, acumulando 9 victorias y 1 revés, donde trabajaba como abridor relevista e incursionaba como bateador.
El 12 de agosto de 1939 en 1 extra ining de 10 entradas vence a Nicaragua 4 a 3 en un reñido enfrentamiento frente a José Luis, el chino Menéndez, otro coloso de aquella época, teniendo el privilegio de convertirse en el primer serpentínero en ganar para Cuba un partido en un campeonato mundial consiguiendo liderazgo de los lanzadores con 3 y 0 y promedio de 0.95 carreras limpias.
Víctima de una insuficiencia renal crónica, "Natilla" falleció en el Hospital "Camilo Cienfuegos", de la capital, el 8 de marzo de 1979, a los 61 años. Fue velado en el Museo Deportivo de Santa Cruz del Norte, donde vivió sus últimos años y sepultado en su natal Jaruco.