Combatiente revolucionario cubano. Participó en la lucha guerrillera en la Sierra Maestra. Dirigió la escuadra de tanques que participó en el derrocamiento de las fuerzas mercenarias en Playa Girón. Cumplió varias misiones internacionalistas en África y América Latina. Ocupó varios cargos en la dirección de la Revolución. Es considerado Patriota Insigne del municipio Báguanos.
Nació en el barrio de Palmarito de Tacámara de la provincia de Oriente, de familia campesina media, allí pasa su infancia y parte de su juventud.
Hijo de Néstor López Hernández y de Rosa Cuba Mora, los que tuvieron 11 hijos y uno con otra mujer, el que Rosa adoptó.
En la escuela llegó hasta el sexto grado. A los 16 años su padre le dijo: "La escuela esa es en el pueblo, y los campesinos en el pueblo se corrompen, usted coja su machete y su guataca y dedíquese a ayudarme aquí en el campo". Néstor padre le tenía asignado a cada hijo las herramientas; tenían que trabajar por obligación, eso era una ley. Por varios años Néstor lo hizo así, picó caña y trabajó como carretero y camionero, tiraba caña para el central Báguanos, tenía entre 17 y 19 años de edad.
En el año 1957 se unió a una célula del movimiento revolucionario 26 de julio, que encabezaba en Cuba la lucha para derrocar a la dictadura imperante en el país. Una de las tareas más importantes de la célula era recaudar fondos para el Ejército Rebelde, que dirigido por Fidel Castro y con su base en la Sierra Maestra, había comenzado a librar una guerra revolucionaria.
En mayo de 1958 a medida que se intensificaba la represión del régimen, López Cuba y un grupo de sus compañeros se fueron a la montaña para unirse al Ejército Rebelde, allí se incorporaron al Segundo Frente Oriental "Frank País", dirigido por el comandante Raúl Castro Ruz.
Recién incorporado es enviado a la Loma Capellal, donde se combatía, en la columna del comandante Casillas, participando en varios combates tanto en la sierra como en el llano, entre ellos Janata, San Luis en dos ocasiones (carretera a Palma Soriano), Cueto, Los Palacios, entre otros. Terminó la guerra en la compañía "C" Roberto Estévez Ruiz, perteneciente a la columna 17, que dirigía el comandante Antonio Enrique Lussón, al frente de su compañía estaba el hoy general de cuerpo de ejército Abelardo Colomé Ibarra (Furry).
El 1 de enero de 1959, Triunfo de la Revolución Cubana, lo sorprende rodeando el regimiento de Holguín, logrando su rendición. De esta forma parte hacia La Habana formando parte de la caravana de la libertad, dirigida por Fidel Castro, participando en la entrada triunfal a la capital y en el acto celebrado en la noche del 8 de enero en el Campamento de Columbia, y de allí fue designado al Campamento de Managua. Ya en esa unidad comienza su vida como Tanquista, pasando los primeros cursos y concluye con los grados de sargento.
En ese mismo año contrae matrimonio con la joven Daysi Salazar. De esta unión nacen Odalis López Salazar y Néstor Sergio López Salazar.
En octubre de 1960 comienzan a llegar los primeros tanques soviéticos a Cuba. De inmediato se organizó un curso intensivo para aprender a operarlos; lo que aprendían en la mañana con los instructores soviéticos lo tenían que enseñar en las medidas de sus posibilidades al resto de los compañeros por la tarde.
En diciembre de 1960 es ascendido al grado de 2do teniente. De este modo se convirtió en el primer jefe del batallón de tanques del Ejército Rebelde. Al terminar el curso de capacitación, contrarrevolucionarios organizados por la CIA lanzaron la Invasión de Bahía de Cochinos.
La mañana del 17 de abril de 1961, López Cuba que aún no sabía del ataque, recibió orden de partir inmediatamente para Matanzas a la cabeza del contingente de tanques. Cuando alcanzó su destino le sorprendió encontrarse frente al Comandante en Jefe, quien le dijo de la invasión por Playa Girón y ordenó la unidad al combate.
Con cuatro tanques en funcionamiento, la escuadra avanzó acompañada de una unidad de milicianos a pie. Libraron fuertes combates y ayudaron a contener el avance inicial de los invasores, los cuales fueron derrotados en 72 horas por las Fuerzas Armadas Revolucionarias y las Milicias Nacionales Revolucionarias.
En las acciones combativas fue alcanzado por el fuego de una ametralladora enemiga. Sus compañeros lo llevaron al hospital de campaña, de donde planeaban evacuarlo a Matanzas para operarlo y sacarle el proyectil que tenía alojado en el brazo. Al oír a los otros heridos hablar del avance de las tropas revolucionarias en Playa Girón, dejó su cama del hospital y retornó al campo de batalla.
Estuvo presente durante la última arremetida contra las fuerzas invasoras, mojando las esteras de los tanques en las arenas de la playa. Se encuentra con el Comandante en Jefe, quien le da la misión de preparar un tanque T-34 y un SAU-100 para hacerle fuego al barco mercenario Houston. El Comandante le dispara al barco y este se hunde, eliminando así el último reducto del enemigo que hacía resistencia, hasta que el propio Fidel se da cuenta de que López Cuba sufría de fiebres y escalofríos, ordenando su evacuación.
Después de la batalla fue ascendido al grado de capitán, y lo nombran jefe de las fuerzas blindadas y la tarea de organizar las primeras fuerzas de este tipo en las FAR.
En enero de 1962 es enviado a la URSS a pasar el primer curso de oficial en la especialidad de tanque. En el transcurso de los años pasó varios cursos de preparación en Cuba, y estuvo en la academia Voroshilov de la Unión Soviética.
En octubre de 1973 fue a cumplir una misión a Siria, al frente de un batallón de tanques que más tarde pasó a ser todo un regimiento. Ese año las fuerzas sirias y egipcias se habían ido a la guerra contra el ejército de Israel para tratar de recuperar las alturas de Golán, el territorio ocupado por los israelíes y el desierto del Sinaí. Aunque la misión cubana no participó en los combates, organizó la fortificación de las defensas sirias y ayudó a disuadir a los israelíes de más agresiones. La unidad permaneció en Siria hasta febrero de 1975, regresando luego a Cuba, donde es ascendido al grado de Comandante.
Poco después de su regreso se unió a los primeros internacionalistas cubanos que llegaron a la República Popular de Angola, a finales de 1975 en respuesta a una solicitud de ayuda urgente de parte del gobierno que recientemente se había independizado para combatir una invasión sudafricana.
Al llegar a Angola iba al frente de un batallón de tanques, el que después se incrementó a un regimiento. Cuando se avanzó hacia Nueva Lisboa y posteriormente al sur, lo nombran jefe de la columna que había dirigido Raúl Díaz Argüelles. Participó en diferentes combates, la mayor parte del tiempo en el monte, avanzando hacia el sur en formación de tanques.
En marzo llegó a la frontera con Namibia; su columna fue la primera que hizo contacto con los sudafricanos.
En octubre de 1976 ya estaba de regreso en La Habana.
Luego de la victoria de la revolución nicaragüense en julio de 1979, Papi López como le llamaban sus allegados, encabezó la misión militar cubana en Nicaragua, en respuesta al nuevo gobierno sandinista.
La misión consistía en ayudar y asesorar al ejército para la defensa de su soberanía nacional contra las fuerzas mercenarias apoyadas por Washington conocidos como los contras. La dura y difícil misión duró tres años, cumpliéndose el objetivo encomendado.
Al regresar a Cuba fue ascendido al grado de General de Brigada y lo designan jefe de la División Política de las FAR, posteriormente es ascendido al grado de General de División por los logros obtenidos en su carrera militar.
En el año 1996, en la primera conferencia nacional de la ACRC, es elegido por unanimidad como su vicepresidente ejecutivo. También fue miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Después de hacer una brillante carrera militar y haber desempeñado diversos cargos en las Fuerzas Armadas Revolucionarias y cumplir hermosas páginas de historia en Cuba y otras partes del mundo, fallece el 15 de octubre de 1999 a la edad de 61 años tras batallar duro por la vida contra la leptospirosis.
Sus restos descansan en el Panteón de los Caídos por la Defensa en el Segundo Frente Oriental "Frank País García".
En Enero de 2004 es propuesto como patriota insigne del municipio Báguano, siendo aprobado por todas las instancias del Partido y el Gobierno.