Hombre de vasta cultura y extraordinaria sensibilidad humana, de reconocido prestigio nacional e internacional en el campo de la Pediatría y la alimentación y nutrición humanas, que puso todos sus esfuerzos y conocimientos al servicio de la salud humana, en especial la de los niños y en la rama de la nutrición.
Fue un hombre brillante desde sus tiempos de estudiante, siempre destacado con las mejores calificaciones y títulos. Se graduó con el primer expediente del curso de 1962 en la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana. Ese mismo año se incorporó al Servicio Médico Social Rural, experiencia puesta en práctica por la naciente Revolución para llevar la salud a los más apartados rincones del país. Ofreció sus servicios como médico en Bernardo, región de Baracoa, en la provincia de Guantánamo, a los cuales sumó su desempeño destacado como maestro de Superación Obrero-Campesina. Fruto de esta labor son los primeros alumnos graduados de técnicas de enfermería.
También tuvo su impronta en la cultura de la región, pues contribuyó a llevar el cine portátil a los pobladores y su interés por la investigación lo llevó a realizar el primer trabajo epidemiológico y social del poblado con el estudio parasitológico y nutricional que presentó en el Primer Congreso Médico Nacional.
Hizo la Residencia en Pediatría en el hospital pediátrico docente William Soler y se graduó como Especialista en Pediatría en 1966. Organizó la docencia de la especialidad en varios hospitales de provincia, lo cual le valió el reconocimiento al más alto nivel de dirección del Ministerio de Salud Pública.
Realizó estudios de Nutrición en Pediatría en la Universidad Médica de Semmelveis, Hungría y se calificó como PhD en 1978 en la Academia de Ciencias Húngara por su trabajo “Índice energía-proteína: un nuevo enfoque de la evaluación del estado nutricional”. En 1980 el Comité Cubano de Grados Científicos le otorgó el Doctorado en Ciencias Médicas.
Desde 1977 fue Profesor Titular de Pediatría y desempeñó múltiples actividades profesionales y administrativas, entre las que se pueden resaltar la jefatura de Médicos Internos y Residentes del hospital pediátrico docente William Soler, Subdirector de ese hospital, Subdirector de Investigaciones de la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana, Vicedecano de Investigaciones de la Facultad de Ciencias Médicas de La Habana y Director de Investigaciones del Instituto de Nutrición e Higiene de los Alimentos desde 1984, cargo que ocupaba al fallecer.
Innumerables fueron sus actividades científicas: participó en más de noventa eventos nacionales e internacionales como conferencista, invitado, presidente o miembro de simposios, talleres y mesas redondas; presidente o secretario de sesiones científicas y miembro de múltiples comités organizadores de eventos con más de 140 ponencias. Publicó más de 150 trabajos científicos en forma de libros, monografías y artículos en publicaciones periódicas nacionales y extranjeras. Fue Secretario de la Sociedad Cubana de Pediatría, Director de la Revista Cubana de Pediatría hasta su muerte, miembro del Comité Asesor para la Nutrición de la Infancia y de Políticas de Investigación sobre Salud, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) desde 1977, del Comité de la Unión Internacional de Ciencias de la Nutrición en varios períodos, hasta su fallecimiento; Presidente del tribunal para la selección del mejor trabajo científico en salud pública, miembro de la Comisión Nacional para el Otorgamiento de Grados Científicos, de la Sociedad Internacional para el Estudio de los Ácidos Grasos y Lípidos, de la Sociedad Internacional de Pediatría, de la Academia de Ciencias de Nueva York, de la Asociación Latinoamericana de Pediatría y Latinoamericana de Nutrición, del Comité Asesor de la Revista Nutrition y de la Revista Cubana de Alimentación y Nutrición. En su actividad docente impartió 51 cursos nacionales y 16 internacionales, profesor invitado en congresos nacionales e internacionales en varios países de América y otros continentes. Tutoreó 21 tesis de Especialista y 8 doctorados de Pediatría o Clínica de la Nutrición.
Ostentaba al morir numerosas distinciones y premios nacionales e internacionales en los campos de la docencia y la investigación. Igualmente, recibió distinciones honoríficas de ciudades e instituciones extranjeras como reconocimiento a sus méritos:
Huésped de Honor de la capital de la República decretado por la H. Alcaldía Municipal de Chuquisaca, durante el XI Congreso Boliviano de Pediatría, el 22 de septiembre de 1983.
Miembro de Honor de la Sociedad Dominicana de Pediatría, 25 de agosto de 1984.
Miembro Honorario del Colegio Médico de Tungurahua, decretado por ese colegio al ser conferencista en el XI Congreso Médico Nacional en la ciudad de Ambato, el 13 de abril de 1987.
Miembro activo de la Asociación Latinoamericana de Pediatría, el 5 de enero de 1989.
Huésped de Honor de la ciudad de Cochabamba decretado por la alcaldía de la H. Municipalidad de Cochabamba, el 20 de junio de 1990.
Huésped distinguido de la Ciudad de Mérida, decretado por el Concejo del Municipio Libertador, Estado de Mérida, Venezuela, el 28 de noviembre de 1991.
Por el conjunto de su obra y su trayectoria científica y profesional, la Organización Panamericana de la Salud le extendió una propuesta para ocupar el cargo de Asesor Regional en Alimentación y Nutrición de esa Organización a desempeñar a partir de 1992, pero el diagnóstico de su enfermedad no hizo posible su consideración.