Paquita es cubana hasta la raíz

Yo soy cubana, yo soy patriota,
yo no transijo con la opresión;
yo quiero libre ver a mi patria
de toda extraña dominación.
Y viva Cuba, viva el machete,
viva el valiente que lo empuñó:
¡Hurra! A los montes hijos de Cuba, si nos engaña la Intervención.

Después de recitar estos versos del Bolero de Marianao, fechas y nombres escondidos en las páginas de nuestra historia, la profe Francisca López Civeira, –Paquita para sus alumnos– aseguró que no tiene buena memoria.

En sus casi 50 años de carrera, esa doctora en Ciencias Históricas ha recibido numerosos reconocimientos, que guarda celosamente en la sala de su casa. Ocupan un lugar especial el Premio Nacional de Historia, que recibió en 2008, y el Maestro de Juventudes, concedido el año pasado. Sobre esa misma mesita, nos confiesa, pondrá el Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas 2022, que se le entregará en la venidera Feria Internacional del Libro de La Habana.

Hija de emigrantes españoles, se siente completamente cubana. «Lo primero que yo bailé en mi vida fue muñeira, jota y paso doble, pero oigo un guaguancó y se me van los pies. Mi papá nos decía a mi hermana y a mí que éramos cubanas, y como cubanas teníamos que crecer, independientemente de que oyéramos la música española o que viéramos las películas de allá. La cultura de lo que te rodea se te mete por los poros y te llega a la raíz».

Todavía activa en el magisterio, imparte cuatro asignaturas, dos en grado y dos en posgrado, en la Facultad de Filosofía, Historia y Sociología de la Universidad de La Habana. A este centro de altos estudios ha estado vinculada casi toda su vida, desde que entró como estudiante en los años 60. Tras graduarse se convirtió en profesora de la institución, especializada en Historia de Cuba.

«En mi decisión por esta rama influyeron mucho los profesores que tuve. Mi profesora de Historia de Cuba, la doctora Olga López, daba unas clases analíticas, pero a la vez muy emocionales. Ella se montaba a caballo con Máximo Gómez y temblaba de indignación con la Enmienda Platt. Tuve otros maestros muy buenos como Beatriz Malle, Daysi Rivero, Zaira Rodríguez y Alejo Carpentier».

Diferentes circunstancias la llevaron a especializarse en la primera mitad del siglo xx, la época conocida como la República Burguesa.

Sobre estos años López Civeira opina que hay etapas sobre las que no se profundiza lo suficiente. «Siento que en las últimas décadas el proceso revolucionario de los años 30 está obviado. A veces pasan fechas importantísimas y nadie se acuerda.

¿Cuáles fueron los referentes de Raúl Gómez García para escribir Ya estamos en combate? Maceo, Martí, Mella, Guiteras… ese proceso fue imprescindible para la Generación del Centenario, que logró la Revolución».

Otro de sus temas predilectos para investigar es la vida y obra de José Martí. Fruto de la admiración por el Apóstol ha escrito los libros Homenaje a José Martí en el primer centenario de su muerte en combate y Cien preguntas sobre Martí, uno de los títulos más populares de la Editorial Gente Nueva.

Paquita ama la tierra donde vive, su historia y su cultura, y como buena maestra, ama a sus estudiantes. «No hay mayor satisfacción que ver un alumno que crece, que publica algo que aporta. Y si ese alumno te dice, “¡Gracias, profe!”, piensas: “Qué bueno, he sido útil”».