Omara Portuondo canta a la vida en su 90 cumpleaños
Dedicada durante más de 70 años a la cultura y a engrandecer la música cubana en el mundo, la cantante Omara Portuondo celebra hoy la vida con un concierto online junto a artistas de varios países.
Desde el Teatro Sauto de la provincia de Matanzas, 'la novia del feeling' invita a esperar su cumpleaños 90, acompañada de agrupaciones de la nación caribeña como Los Muñequitos de Matanzas, la Orquesta Failde y el grupo de Teatro de Las Estaciones.
Asimismo, se sumarán a la velada programada para las 21:00 hora local, la intérprete Haydée Milanés, con la cual colaboró recientemente en la producción del álbum Amor, así como la peruana Eva Ayllón y la guatemalteca Gaby Moreno.
Este 29 de octubre, la emblemática intérprete cubana cumple 90 años y por la efeméride la cultura en la isla le rinde homenaje a la prolífica trayectoria de la conocida como 'la diva del Buena Vista Social Club'.
Como parte de los tributos la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales prepara un fonograma dedicado a ella, en tanto la disquera cubana Bis Music agasajó a la artista con el estreno de la placa Mariposas, nominado en la categoría Mejor Álbum Contemporáneo/Fusión Tropical en la edición 21 de los Premios Grammy Latinos.
Igualmente, destaca la producción del video clip animado, realizado por Alejandro Armada con el auspicio de varias instituciones culturales en la mayor de las Antillas, que recorre momentos importantes de la vida y obra de la artista.
La celebración por las nueve décadas de la cantante inició desde enero con el concierto de clausura del Festival Internacional Jazz Plaza, en el cual interpretó clásicos de su repertorio junto al pianista Roberto Fonseca.
Con 30 discos en solitario, la Portuondo ostenta la distinción como Embajadora de la Cruz Roja Internacional el Latin Grammy a la Excelencia Musical y la medalla de oro al Mérito en las Bellas Artes que concede el gobierno de España, entre otros galardones.
Omara Portuondo Peláez
cantante, arte
Hay algo de cinematográfico en la historia de Omara Portuondo. Hija de una mujer de familia española y bien que abandonó su círculo social para casarse con un bello jugador negro del equipo nacional cubano de béisbol —lo que la llevó a tener que ocultar en público este enlace, pues los matrimonios mixtos no estaban nada bien vistos en Cuba en aquella época—, Omara entró en contacto con la música ya en su más tierna infancia. Como en cualquier otro hogar cubano, la futura cantante y sus hermanos crecieron rodeados de la música que, a falta de gramófono, entonaban sus padres.