Diseñador Escénico y Director Teatral.
Nació en Cumanayagua, provincia de Cienfuegos, en 1936.
A la edad de siete años se traslada a residir en la ciudad de La Habana donde estudia la primera y segunda enseñanza en el colegio Champagnat de los HH Maristas de la Víbora, graduándose de Estudios Comerciales en 1955.
En 1957 con un grupo de aficionados, forma el grupo GEDO (Grupo Experimental de Opera) en el que participa como asistente de dirección y jefe de escena, presentando funciones en la Sala Teatro del Museo Nacional y otros espacios teatrales de la capital y del interior del país.
Durante 1958-59, trabaja como asistente y jefe de escena de directores nacionales e internacionales de las temporadas de ópera de la SPAM (Sociedad Pro-Arte Musical) donde se presentaron figuras tan importantes como Victoria de los Ángeles, Renata Tebaldi, etc.
En 1960-61, trabaja para las puestas en escena de Carmen, La Traviata, Rigoletto y Fausto, presentadas por la Cooperativa de Arte Popular del Municipio de La Habana y el Consejo Nacional de Cultura. Colabora en una serie de programas para la Televisión Cubana donde se presentaron además de estas óperas otras hasta el número de trece, asumiendo la responsabilidad de jefe de escena, asistente del director y especialista seleccionando el vestuario.
En 1962 dirige la puesta en escena de la ópera de J.C. Menotti Amelia va al baile para la SPAM. En Marzo de ese mismo año comienza como director de escena del Ballet Nacional de Cuba, cargo que desempeña durante diez años, realizando en esta compañía además labores como miembro de la Junta Artística y diseñador de vestuario.
En 1967 forma parte de la Dirección Artística del Teatro Lírico Nacional y presenta bajo su dirección espectáculos en el Teatro Musical de La Habana.
En 1966 dirige para la Opera Nacional la puesta en escena de las operas de G.C. Menotti El Teléfono y La Medium en la Sala Teatro Hubert de Blanck, volviéndose a presentar esta última en 1968 en la Sala García Lorca del Gran Teatro de la Habana en función conjunta con el Ballet Nacional de Cuba. También en 1968, dirige el equipo técnico del espectáculo donde se presentó la famosa “vedette” internacional Josephine Baker en sus dos últimas visitas a Cuba, diseñándole además el vestuario para su presentación interpretando números musicales cubanos.
En diferentes oportunidades realiza giras con el Ballet Nacional de Cuba a China, Viet Nam, Mongolia, RDA, Polonia, Bulgaria, Rumanía, Checoslovaquia, Hungría y la URSS, participando en París en el Festival Internacional de Ballet del Teatro des Champs Elysèes en 1966, donde el ballet cubano obtiene el Gran Prix de la Ville de París, y en las Olimpiadas Culturales en la Ciudad de México en 1968.
En 1972 comienza a trabajar como diseñador de vestuario en la Empresa de Espectáculos Artísticos del Instituto Nacional de Turismo (posteriormente Turarte), realizando desde entonces diseños para los espectáculos de los principales centros nocturnos de todo el país. Al mismo tiempo colabora con la Dirección Nacional de Música del Consejo Nacional de Cultura, diseñando vestuario para recitales, concursos internacionales y representaciones de delegaciones artísticas cubanas en el extranjero, de los más importantes artistas de la música popular.
Desde su fundación en 1967, brinda asesoramiento técnico y artístico al Ballet de Camagüey, donde ha diseñado gran parte de su repertorio. Continúa en la actualidad diseñando eventualmente para el Ballet Nacional y el Centro Pro-Danza.
En 1979 ingresa como miembro de la Sección de Diseño de la Asociación de Artistas Escénicos de la UNEAC (Unión de Escritores y Artistas de Cuba) y a partir de 1985 forma parte también de la Asociación de Artistas Plásticos.
En 1980 dirige para la Opera Nacional una nueva puesta en escena de las óperas El Teléfono y La Medium en el Gran Teatro de la Habana. En el mes de julio del propio año recibe el premio al mejor diseño de vestuario del Carnaval de La Habana, otorgado por la revista Revolución y Cultura, hecho este que se repite también en 1981.
Ha participado entre otras, en la exposición La Danza en el Teatro, con motivo del Festival Internacional de Ballet en 1974, y en la exposición de diseño teatral Cuadrienal de Praga en 1983 y 1987.
En 1988 es elegido como presidente de la Sección de Diseño de la Asociación de Artistas Escénicos de la UNEAC. En el mes de julio del propio año realiza los diseños para el espectáculo Tropicana en Salsa Cubana que fue representado en las ciudades de New York y Los Ángeles obteniendo grandes elogios de la crítica especializada entre las cuales se encuentra la revista Variety.
En 1990 participa en el primer Concurso de Diseño Escénico Rubén Vigón, donde obtiene el premio Al Mejor Diseño, por el espectáculo musical Brindis por Tropicana (show con el que se conmemoró el cincuenta aniversario de la creación de este famoso centro nocturno).
Miembro del Consejo de Expertos del Consejo Nacional de las Artes Escénicas desde su creación y del jurado del Carnaval de La Habana desde 1985, así como del Consejo Artístico de la empresa Turarte.
Conforma con otros especialistas la comisión conjunta Instituto de la Música- UNEAC-MINTUR, para la revisión y asesoramiento de los espectáculos musicales y de cabaret, forma parte además de la comisión encargada de la valoración de los diseños relacionados con las artes escénicas creada por el Fondo Cubano de Bienes Culturales, y de la comisión de evaluación de los diseñadores del Consejo Nacional de las Artes Escénicas.
En 1991 viaja con el primer espectáculo del cabaret Tropicana que visita el continente africano, permaneciendo durante cuarenta días en la República de Zaïre, donde se le otorga la condecoración oficial al Mérito Artístico, Científico y Literario.
En 1992 recorre Francia con el espectáculo musical ¡Oh La Habana! con las principales figuras del cabaret Tropicana.
Posee amplio curriculum que abarca títulos diseñados para la Opera, Zarzuela, Ballet Clásico, y Espectáculos Musicales y de Cabaret.
En 1993 el Ministerio de Cultura le otorga la medalla Distinción por la Cultura Nacional, como reconocimiento a su larga y valiosa trayectoria artística. En noviembre de ese mismo año es elegido durante el V Congreso de la UNEAC como miembro del Consejo Nacional de esa institución.
En 1999 le es otorgado el diploma Nicolás Guillén por sus destacados aportes al desarrollo de la Cultura Cubana.
En el mes de marzo del año 2001, El Consejo de Estado de la República de Cuba le otorga la Medalla Alejo Carpentier, en reconocimiento a la destacada labor desarrollada en el diseño de vestuario, de alto valor estético, resaltando la cubanía y valores nacionales.