Realizador audiovisual cubano, director de programas de la Televisión Cubana.
Es creador del programa Lucas y de los Premios Lucas, el evento más importante del videoclip cubano, que reúne todo el quehacer de los realizadores de este género audiovisual y premia los mejores videoclips en el año.
Los premios Lucas surgen en el año 1997 bajo el mando y la magia del artista para devenir en un codiciado trofeo por la seriedad con que se entregan estos premios y por constituir un esperado y reconocido espectáculo musical de excelencia para todo el pueblo de Cuba. Orlando Cruzata puede considerarse como creador exitoso e incansable pues es hoy un probado promotor y defensor del videoclip cubano y de las potencialidades del país en esta manifestación artística.
Ha sido el director de programas de televisión tales como En confianza, El sonido subterráneo, El patio de mi casa es... (el programa de Lucas) y Espacio reservado, entre otros.
Fue una tía abuela quién encaminó sus pasos para comenzar a trabajar en la televisión en el año 1981. Allí comenzó de ayudante de escenografía, en atrezzo. Trabajando en la propia televisión se vincula al grupo humorístico Nos y Otros que se funda en el año 1982 en la Universidad de La Habana integrado por cuatro personas y al cual estuvo vinculado durante 15 años.
Entra al grupo por un amigo pues él tenía un pequeño grupo de aficionados en el ICRT que hacían algunas actuaciones en lo que es ahora el Estudio de Sono Caribe y al verlo le convenció para que bajara a una peña que tenían en la Casa del Joven Creador en el año 1985-1986. En ese propio año pasa a utilero y se vincula más al mundo de las filmaciones.
En 1985 empezaron a actuar en el Guiñol, en las peñas de la Teatrova, junto a Santiago Feliú, Carlos Varela, Gerardo Alfonso y Frank Delgado, y reclutaron nuevos actores para el grupo, como Octavio Rodríguez Churrisco (Churrisco) y Orlando Cruzata.
Inicios en el videoclip
Al principio le atraían más los documentales, los cortos pues el videoclip no llamaba tanto la atención. Comenzó a hacer En confianza en los años 1988-1989. Estuvo un buen tiempo de asistente con Raysa White, en Entre nosotros, y allí aprendió mucho de ella.
En aquella época el videoclip lo veía como algo para el que le gustaba investigar. En el año 1987 se crea el taller de video de la Asociación Hermanos Saíz, que tiene su sede en el Pabellón Cuba, y lo designan al frente de ese taller y con la responsabilidad de administrar las cámaras. Eso lo permitió ayudar a hacer algunos videoclips de los años 80, a Camilo Hernández, al ‘Gago’, a Juancho, personas que hicieron videoclips en esa década”.
Su primer videoclip fue junto con Rudy Mora donde hizo María Magdalena, con quién se ha mantenido trabajando hasta la actualidad realizando más de 100 videoclips. A Rudy lo une una gran amistad y empatía estética.
Concluyó sus estudios preuniversitarios con muy buenos resultados y aunque sentía inclinación por las carreras de Historia del Arte y Medicina entró en el Instituto Superior de Cultura Física Manuel Fajardo el cual no concluyó.
Realizó estudios de edición en el ICRT y en el año 1989 ingresó en la carrera de Dirección de Cine, Radio y Televisión, en la FAMCA (Facultad de Arte de Medios de Comunicación Audiovisuales) del Instituto Superior de Arte, en la que se tituló cinco años después (1994).
Programa Lucas
En el año 1997 a Orlando Cruzata se le ocurrió proponer, de forma coherente y habitual para la televisión, un programa de promoción del videoclip cubano y así surge Lucas. Cruzata ya había realizado una buena cantidad de videoclips junto con Rudy Mora y en ese afán particular por la investigación, había visualizado centenares de ellos de todas partes del mundo.
Los Premios Lucas o Lucas es un proyecto de la Televisión Cubana creado por Cruzata que incluyen el programa Lucas y los premios que tienen como objetivo estimular la producción de videoclips cubanos, premiando la creatividad e originalidad en cada género en competencia, además que promocionan y divulgan el videoclip cubano tanto a nivel nacional como internacional.
Cruzata fue poniendo en su trabajo audiovisual lo aprendido en Nos y Otros y viceversa. La edición en la TV, en video, le dió el sentido de la edición del espectáculo en el teatro y el uso adecuado de la escenografía.
El espacio Lucas lleva una carga importante de humor, ya que están la sátira y el absurdo en medio de un entorno novedoso del diseño, en una visualidad y transgresión constante; no tiene la típica conducción y presentación de programas de televisión. Todo eso es también Nos y Otros.
Los Lucas rompieron con todo lo que se hacía en la televisión desde el vestuario de los conductores hasta el novedoso movimiento de las cámaras en el propio programa. Lucas luego se multiplicó en varios canales: el Lucas plus, de Multivisión y el Lucasnómetro del Canal Educativo.
Citas de Cruzata
Cruzata desde la trinchera de los Lucas defiende a capa y espada el videoclip cubano.
El nombre de Lucas
Estuve viviendo como un año y pico en España, y había un personaje humorístico que se llamaba Lucas y yo me reía con él. Cuando vine para Cuba, que comencé con el lío de echar para adelante los videoclips, un día le dije al conductor del programa en ese momento: “Mira chico, por qué cuando te despides, no dices: «Hasta luego, Lucas»”. A la semana había como siete u ocho personas llamando, preguntando quién es Lucas, qué cosa es Lucas. Bueno, ya después lo conceptualizamos: Lucas tiene que ser eso, la posibilidad de crear, la posibilidad de que el videoclip cubano tenga un espacio, un nombre, una calidad, un respeto… Si tú desarrollas el videoclip, estás desarrollando la discografía, estás desarrollando la música, la estás promoviendo y la cultura cubana se engrandece.
Importancia de la popularidad de los Lucas
Estamos hablando de un programa de videoclips, que se hace para promover a un músico, una imagen, incluso a un realizador, porque Lucas desde sus inicios le dio mucha importancia a esta figura. Entonces, en lo referente a la popularidad, un programa de videoclips en Cuba tiene que ser popular. No olvidemos que estamos en la Isla de la música. Ahora, el tema de si lo ven más o menos gente, depende de muchas cosas.
Detalles de los Lucas
Influye mucho la estética del proyecto. En nuestro caso hemos sido coherentes a lo largo de estos 11 años, ante detractores y partidarios. Por ejemplo, nunca fue popular que un presentador saliera en pantalla vestido de negro y con gafas oscuras porque constituía un obstáculo a la comunicación. Con ese código rompimos y la gente lo ha aceptado. Y ese es un código de Lucas.
Lucas: un termómetro identitario de los cubanos
Cuando vamos a hacer Lucas buscamos que estén representados Cuba y los cubanos. Tenemos un principio y es que “viva Cuba”. Quizá por eso no entiendo por qué dedicarle tanto espacio a la música foránea en nuestra televisión, si cuando recorres los canales extranjeros lo cubano no está. Del mismo modo existe una política de programación basada en las palabras de Fidel Castro a los intelectuales en los años sesenta: “Dentro de la Revolución todo, contra la Revolución nada”. Y yo le sumo la frase martiana: “Con todos y para el bien de todos”. A esa política nos debemos, porque Lucas no es un programa aparte del ICRT.
Barreras del videoclip cubano
Los problemas ya no están tanto en la falta de tecnología como en su difusión. Los videoclips no se transmiten la cantidad de veces necesarias como para que funcionen y cumplan su rol. El video más popular del año se transmite en nuestra TV, cuando más, 15 veces al año. Eso en términos de promoción resulta nada. Por el nivel que ha alcanzado, el clip cubano necesita de un mayor tiempo al aire. Ese fenómeno frena incluso la producción de videos, porque muchas disqueras no quieren invertir en un videoclip pues luego no se divulga lo suficiente.
Televisión culta
El otro día estaba en una reunión y se preguntaban por qué en la televisión no aparece más música clásica. La televisión no es para la alta cultura, la televisión debe tener momentos de alta cultura. Puede existir tal vez un canal, (cuando haya veinte o treinta canales, o televisión por cable, que existen dondequiera), como existe un canal para los animalitos, para las historias…Pero la televisión que llega a siete u ocho millones, no puede ser a full para los talentos. Tiene que haber momentos de banalización, momentos políticos…. Porque es que todo eso es cultura.
¿Dónde está el quid de la cosa? En hacerlo bien. Usted puede hacer un programa banal, pero tiene que hacerlo bien, que tenga equilibrio, que no se te vaya al mal gusto, a lo chabacano, hacia el facilismo…… Lo que hay es que sentarse a pensar cómo nuestra televisión, que ya es una televisión culta, o al menos tiene una tendencia a que lo sea y no a lo comercial, sea menos aburrida; sí porque hay muy buenos programas pero son aburridos, no son atractivos, son bloques, sin embargo son programas muy interesantes, lo que le falta es un poco de factura.
Orlando Cruzata