Enrique Loynaz del Castillo nace en el 1871, en Puerto Plata, República Dominicana.
A Enrique Loynaz del Castillo el patriotismo le llegó desde la cuna. Su padre fue el Comandante Enrique Loynaz y Arteaga, quien combatiera junto a las huestes del Ejército Libertador durante la Guerra de los Diez Años. Nació en Puerto Plata, República Dominicana
Con solo 15 años se alistó en la expedición que organizaban los generales Serafín Sánchez y Francisco Carrillo, que en acuerdo con Máximo Gómez vendría a Cuba. Era 1885.
Más tarde, en 1892, conoció a José Martí en Nueva York y colaboró con él en el envío de una expedición de armas a la Isla. Fracasada esta, debe refugiarse en Costa Rica. Allí lo recibió Antonio Maceo, a quien salvará la vida en el teatro San José, cuando este es herido de gravedad por un español. Nuevamente trabajará con el Apóstol en Nueva York, esta vez en la preparación de la nueva contienda revolucionaria.
A la Guerra de Independencia se incorpora en julio de 1895 y junto al contingente invasor de Maceo participó en significativos combates como Mal Tiempo, Coliseo y Calimete, entre otros.
De su autoría es el Himno Invasor, de vibrante fibra guerrera y que acompañaría a las huestes mambisas hacia Occidente.
Enrique Loynaz del Castillo se licenció del Ejército con los grados de General de Brigada, alcanzados por méritos de guerra. Para este entonces había participado en 60 acciones combativas.
Durante la pseudorepública fue designado Ministro Plenipotenciario en México; Comisionado General en la Exposición de San Francisco; Ministro en Portugal, Panamá, Centro América, Santo Domingo, Haití y Venezuela.