Se despide Alexander Malleta en el Estadio Latinoamericano del Cerro

Ante la mayor concurrencia de público este año en el Latinoamericano, estadio donde lo veneraron durante 22 temporadas, se despidió hoy del deporte activo en Cuba el estelar jugador de Industriales, Alexander Malleta.

Cuarto bate y defensor del primer cojín, Malleta ganó tres títulos en series nacionales con los Leones (1996, 2006 y 2010) y también fue campeón con Occidentales en la cuarta Superliga cubana (2005).

Al hacer una mirada retrospectiva de su carrera, reveló en diálogo con Prensa Latina que el campeonato de 2006 ante Santiago de Cuba resultó el momento competitivo que más lo marcó en el béisbol.

Ojalá este año se repita la misma final, comentó, aunque ponderó que todos los cetros tienen una historia, fueron resultado de sacrificios, entrega y significan mucho para él.

Sobre la ceremonia celebrada en el mítico estadio capitalino, agradeció a todos los que contribuyeron a un momento de tantas emociones.

Fue una tarde entre familiares, amigos, entrenadores y atletas de varias generaciones, dirigentes y tantos seguidores de Industriales que vinieron a despedirme del béisbol activo, pero saben que seguiré en este deporte.

Confirmó que continuará en el cuerpo técnico del equipo y se prepara para la responsabilidad que le asignen, en la alusión a la posibilidad de que releve a Guillermo Carmona cuando entregue el puesto de mando de los Azules.

En su hoja de servicios, Malleta promedió .297, con slugging de .488, disparó 257 jonrones y 332 dobletes, entre sus 1778 imparables, según los datos del estadístico Benigno Daquinta.

A la defensa exhibió average de .989 en 21914.2 innings jugados.

En torneos internacionales, Malleta atesora dos oros en Juegos Centroamericanos y del Caribe (2006 y 2014) y uno en Panamericanos (2007), además fue plata olímpica (2008) y mundial (2007). También formó parte de la selección nacional que participó en el Clásico Mundial de 2009.

Yo soy un hombre de béisbol y voy a seguir ligado siempre a este deporte y a mis Leones que tanto orgullo me dieron jugando, concluyó Malleta visiblemente emocionado.