Tony es un ex-beisbolista cubano muy reconocido que juega la posición del bateador designado y del jardinero izquierdo. en ocho veces All-Star de la MLB que retiró el jersey número 6 de los Twins de Minnesota.
Tony Oliva nació en Consolación del Sur, provincia de Pinar del Rio, se crió en el campo casi nunca jugó béisbol por ser una zona donde no era muy activo el deporte en esa zona en su época, y solo jugaba los domingos en una pequeña liga amateur libre a la que se llamaba Casa Maltas, luego en 1961 fue a los Palacios donde conoció a un señor que era un profesional en el deporte, fue el jardinero Roberto Fernández quien lo vio jugar notando su destreza, y tras verlo lo suficiente le propuso ser un pelotero profesional, tras esto se puso en contacto con el cazatalento Joe Cambria quien era en esos momentos uno trabajador de los Mellizos de Minnesota, enterándose de sus habilidades.
Cambria accedió en fichar a Tony, teniendo inconvenientes ya que Oliva no tenía pasaporte estadounidense, pero por medio de su hermano Antonio utilizó su certificado, y gracias a sus documentos logró conseguir su pasaporte logrando irse de Cuba. Por esta razón Pedro fue llamado Tony después de su llegada a los EEUU, que le obligó posteriormente a testificar en las cortes norteamericanas para legalizar su verdadero nombre de Pedro Oliva, pero conservo el nombre Tony siendo conocido en el mundo del béisbol.
A la salida de Cuba su viaje fue a México, donde estuvo en espera de arreglos de visado por espacio de once días. Luego llegó al campo de los novatos de los Mellizos en la playa Fernandina, la Florida, donde se vio obligado a hospedarse en casa de afroamericanos, ya que los hoteles del lugar no acostumbraban a alquilar a personas de raza negra. Allí las cosas no fueron bien y el equipo de los Mellizos ya le estaba indicando su regreso a casa. Imagínense qué problema, volver a entrar en Cuba.
Fue aquí que Joe Cambria intervino en favor de Tony y aclaró que tanto él como otros dos cubanos tenían las condiciones para ser nuevamente probados. Al inicio se pensó en darle cabida con los avispones de Charlotte, pero no pudo ser y entonces fue enviado al poblado de Wytheville. Con 23 años, en el mismo año jugó para los Mellizos de Wytheville de la Liga Appalachian, clase D. teniendo inconvenientes con el idioma y tener la nominacion del equipo, No tenía otro remedio que jugar pelota para ir poco a poco venciendo las dificultades.
Al inicio le costó trabajo adaptarse al juego en el jardín derecho, pero al bate demostró sus condiciones, promedio de .410 en 64 juegos disparando 31 extrabases. Al final de la temporada los Mellizos le dieron una atención especial al cubano, entendiendo que era un diamante en bruto, que en su liga de instrucciones en St Peterburg, Florida, podría irse afilando en todos los aspectos de juegos.
En 1962 jugó con los Avispones de Charlotte de la Liga Sud-Atlántica (clase A), fueron 127 desafíos y bateó para .350 con 58 extrabases, al final de esa temporada jugó en nueve partidos de los Mellizos, donde bateó 4 hits incluido un doble en 9 veces al bate. En 1963 jugó en AAA, en este caso con los Vigilantes de Dallas-Fort Worth, en 146 juegos, bateó para .304 y disparó 61 extrabases. Nuevamente llevado al final de la temporada al equipo grande, donde bateó 3 hits en 7 veces al bate. Ya era hora de subirlo, Pedro “Tony” tenía entonces 25 años, así fue, en 1964 logro llegar a las Mayores.
Debutando su ofensiva fue de 217 hits en 672 veces al bate, incluido 43 dobles, 9 triples y 32 jonrones, 94 impulsadas, promedio de .323. De esta manera, Tony resultó líder de los bateadores, líder en dobles, líder en carreras anotadas (109) y líder en hits en la Liga Americana. Resultó ser novato del año, siendo el primer pelotero cubano que alcanzaba este galardón y primer novato que lograba el campeonato de bateo en las Grandes Ligas en el siglo XX, y pudo haber sido el MVP de su liga, pero quedó cuarto en esta elección.
En 1965, en la siguiente temporada no bajó su ofensiva, nuevamente subió su empeño conectó 185 hits, aunque bajó algo su producción de extrabases, la que no fue muy reducida, 40 dobles, 5 triples y 16 jonrones, con 98 impulsadas y promedio ofensivo de .321. Por segundo año consecutivo, Tony fue líder de los bateadores, líder en hits conectados y quedó segundo en la elección del MVP de la Liga Americana. En esa temporada de 1965 los Mellizos lograron el título de la Americana y se enfrentaron a los Dodgers en la Serie Mundial, la que perdieron en siete juegos.
Lamentablemente su ofensiva en este último evento fue moderada, conectó 5 hits, incluido doble y jonrón, con sólo dos impulsadas. Algunos coaches de bateo tenían dudas respecto a la posición que Tony adoptaba a la hora de batear, a su entender, una pose débil y un swing golfeante. Para suerte de Tony Oliva, el dueño de los Mellizos, el Sr. Calvin Griffith, prohibió terminantemente que se le acercaran a Oliva para corregir su forma de pararse en home y de batear. Con los resultados que estaba obteniendo, no había nada que modificar.
En 1966 Tony quedó nuevamente de líder en hits conectados con 191, incluido 32 dobles, 7 triples y 25 jonrones, con 87 impulsadas, y alcanzó su primer y único Guante de Oro como jardinero. Su equipo esta vez quedó segundo superado por los Orioles de Baltimore. En lo sucesivo, Tony descendió en su bateo en las temporadas de 1967 y 1968 cuando bateó por debajo de los .300, no obstante nuevamente en 1969 volvió a ser el bateador acostumbrado de .300 o más.
En 15 temporadas en las Mayores, Tony bateó en nueve sobre los .300 para retirarse con un excelente .304 de por vida. En las temporadas de 1969 y 1970 fue líder en hits conectados, con 197 y 204, respectivamente. En 1971 logró su tercera corona de bateo, al promediar .337, y liderar slugging con .546 al disparar 30 dobles, 3 triples y 22 cuadrangulares.
En las temporadas de 1967 (34), 1969 (40) y 1970 (36) fue líder en dobles conectados en la Liga Americana. Los Mellizos discutieron el título de la Liga Americana en 1969 y 1970 enfrentándose a los Orioles de Baltimore, en ambas series los Mellizos fueron derrotados, pero Tony Oliva bateó para .385 y .500, respectivamente. Así que su ofensiva se hizo presente, en cada una disparó 2 dobles y un jonrón.
En la temporada de 1971, cuando por última vez se coronó campeón de bateo, Oliva se lanzó en diving a capturar un batazo en juego que se efectuaba en Oakland y que la hierba estaba húmeda. El pinareño se lesionó la rodilla derecha, lo cual le llevó largo tiempo para poderse recuperar, incluso sólo pudo jugar 10 juegos de la siguiente temporada en esa recuperación.
Durante sus últimas cinco temporadas, Tony Oliva se sometió a ocho operaciones de rodilla, que naturalmente fueron restando fuerza a este gran pelotero. Aún así su bateo, aunque disminuyó, nunca estuvo por debajo de los .270. De 1973 a 1975 disparó 49 jonrones. En 1976 sólo pudo jugar en 67 desafíos, siempre como designado, función que adoptó desde su primera lesión, y fue entonces que le dio el adiós al terreno de juego.
Al final de sus quince temporadas, Tony Oliva bateó 1917 hits en 6301 veces al bate incluido 329 dobles, 48 triples y 220 jonrones, con 947 empujadas, 870 anotadas, 448 bases por bolas y 645 ponches (1 ponche cada 9.77 veces al bate). Su promedio ofensivo fue de .304, con OBP de .353 y Slugging de .476.
En 1964 hasta 1971 Fue elegido para jugar en el partido de las Estrellas, en tres ocasiones, 1964-1967 como abridor en su equipo. En igual período siempre estuvo entre los escogidos para titularse MVP de su liga. Durante este tiempo fue muy elogiado por grandes figuras de la época, entre ellos Lou Piniella, Camilo Pascual, y el Ex big Leaguer y Cronista de las Medias Blancas, Ken Harrelson expresando cada uno de ellos que era uno de los mejores bateadores que haya visto y como el mejor de su tiempo.
También jugó algunas temporadas en las invernales latinoamericanas a finales de la década de los 60. Primero lo hizo en República Dominicana, con las Águilas Cibaeñas en 1968-69 y después en la liga mexicana del Pacífico en 1969-71. Su interés de jugar en México era la de tener la posibilidad de obtener visa para su familia de manera de poderlos ver mientras estuviera en México. Tony jugaba con los Mochis y en el invierno de 1970-71 pudo encontrarse con su madre y su hermana Felicia. Este encuentro permitió también que su abuela pudiera conocer a sus nietos, Anita y Pedro, hijos de Tony.
En 1977 cuando el equipo Cuba se preparaba para su torneo con los profesionales de Venezuela, Oliva pudo visitar Cuba y traer algunos equipos, los que entregó gratuitamente e incluso participó un poco del entrenamiento Durante este tiempo se encontró con el lanzador y deportista olímpico Braulino Vinent, quien se encontraba en el apogeo de su carrera, aprovechando el momento ambos se enfrentaron en un partido donde según se informa Oliva conectó algunos fuertes batazos. Tras esto demostró su apego y sentimiento a su tierra natal donde a pesar de que había pasado tantos años alejado de ella y de su familia.
El número 6 que utilizó Tony Oliva fue retirado por los Minnesota Twins en 1991.
A lo largo de sus 15 años de carrera, Oliva era conocido como una influencia positiva en el club. Fue popular entre los fanáticos y los medios de los ''Twin Cities'' durante su carrera, y recibió el sobrenombre de "Tony-O".
Oliva tuvo increíbles números ofensivos durante su carrera. Bateó 304 pelotas, con 220 jonrones, 947 carreras impulsadas, 870 carreras, 1,917 hits, 329 dobles y 48 triples en 1,676 juegos jugados. En 13 juegos de postemporada, bateó 314 pelotas, con 3 jonrones y 5 carreras impulsadas. Fue seleccionado para el equipo All-Star en sus primeras ocho temporadas, superando el récord anterior de seis veces seleccionadas de Joe DiMaggio.
En un artículo de la revista Esquire de 1976, el periodista deportivo Harry Stein publicó un "All Time All-Star Argument Starter", que consta de cinco equipos de béisbol étnicos. Oliva fue el carrillero derecho en el equipo latino de Stein. En 1981, Lawrence Ritter y Donald Honig lo incluyeron en su libro ''Los 100 mejores jugadores de béisbol de todos los tiempos''. Explicaron lo que llamaron "el Síndrome de Smoky Joe Wood", en el que un jugador con un talento verdaderamente excepcional pero cuya carrera se vio limitada por una lesión.
Los ''Twins'' retiraron el uniforme número 6 de Oliva el 14 de julio de 1991. En el 2000, Oliva fue uno de los seis miembros de la franquicia votados e incluidos en la clase inicial del Salón de la Fama de los Minnesota Twins. También fueron incluidos en el 2000 los compañeros de equipo Rod Carew y Harmon Killebrew, junto con Kirby Puckett, Kent Hrbek y el antiguo propietario Calvin Griffith.
El escritor Bill James, utilizando la lista de Keltner, determinó que Oliva era un "posible candidato al Salón de la Fama". Varios contemporáneos han respaldado la consagración de Oliva en el Salón de la Fama, incluido Tony Pérez, quien mencionó en su discurso de inducción de 2000 que esperaba que Oliva estuviera pronto en el Salón de la Fama.
Oliva fue considerado para el Salón de la Fama del Béisbol Nacional por la elección de su Comité de Veteranos en 2000, pero no tuvo éxito. Fue considerado nuevamente por la elección del Comité de la Era Dorada del Salón de la Fama en 2011, pero fue votado solo por cuatro de 12 personas. En 2014, el Comité de la Era Dorada lo consideró por segunda vez, pero tanto él como Dick Allen estuvieron a un voto de la elección; Ron Santo fue elegido en 2011 y ninguno fue elegido en el 2014.
Vida personal
Oliva comenzó a salir con Gordette (DuBois) a mediados de los años 60. Se casaron en Hitchcock, Dakota del Sur en 1968 y se establecieron en Bloomington, Minnesota. Actualmente vive en una casa que compró en 1972 y sus cuatro hijos viven a menos de 10 millas (16 km) de sus padres. A partir de 2011, Oliva también tiene cuatro nietos.
