Exdiplomático y escritor cubano, hijo del Raúl Roa García (el Canciller de la Dignidad, 1907-1982).
Nació Raúl en la Calzada de Jesús del Monte, en La Habana. Procede de una familia de profesionales, el abuelo materno (Santiago Kourí) era de origen libanés, mientras el abuelo paterno, Ramón Roa (oriundo de Cifuentes), fue mambí en la Guerra de 1868. El padre, Raúl Roa García (1907-1982), fue un destacado diplomático en la etapa inicial de la Revolución cubana; la madre, Ada Kourí (1917-2005), era cardióloga, laboró en el Hospital Calixto García.
Inicialmente vivía en la residencia de los abuelos Kourí situada en Perseverancia, lo hace luego en El Vedado y el Reparto Kholy, hasta pasar los tres a 38 y Petit Boulevard (hoy Calle 36) en Miramar.
Tuvo como profesor de gramática a Antonio Vázquez Gallo, quien escribió una obra que se llamaba Camorra, que puso en el teatro Auditórium (hoy Teatro Auditorium Amadeo Roldán) con el Patronato del Teatro, y a Vázquez Gallo se le ocurrió que Raúl podía trabajar, hacer el papel de un rapaz gallego.
En el teatro estaba también Félix B. Caignet, escritor de la serie Ángeles de la calle, quien le solicita a Vázquez Gallo que Raúl participe en el programa Ángeles de la calle. Vázquez Gallo se puso en contacto con la familia, realmente con la madre, que lo autorizó para que en la serie, en el personaje de Mayito, que lo caracterizaban como el niño rico con harapos en el alma.
También trabajó en el Teatro Experimental del Aire, allí interpretó a Julián del Casal, joven, a Rubén Martínez Villena, joven y el papel del niño que muere con Pablo de la Torriente Brau en Majadahonda (Guadarrama), en España.
Aprendió a tocar guitarra con Sergio Vitier. En ese marco conoce y comparte con Pablo Milanés, Silvio Rodríguez, Sara González y Vicente Feliú.
Desde joven se aficionó a la pintura, labor que realizaba después estando en Praga, y después cuando estaba en Brasil realizó bastantes cosas al óleo, llegando a impresionar e influir en la pintura de René Portocarrero.
A la edad de 23 años, Carlos Lechuga lo propone para que lo acompañe a laborar en la misión diplomática cubana en Santiago de Chile. Trabajó durante 14 años en Nueva York como embajador cubano ante la ONU. Ha desempeñado labores en el servicio diplomático en Praga, París, Roma, Ciudad de México, Brasilia y Santiago de Chile.
Laboró en el Vaticano, pequeño estado sui géneris, la cabeza de la Iglesia Católica, donde le presentó las cartas credenciales al papa Juan Pablo II. El papa lo recibió en su despacho personal, ocasión en que le pregunta por Fidel Castro y también por Raúl Castro.
Amante de la música barroca, prefiere a Johann Sebastian Bach, Mozart y Antonio Vivaldi, esa es la música que prefiere para escribir, para estudiar, también le gusta la música cubana, la música popular, la trovadoresca, la guaracha, el mambo, el danzón.
Ha colaborado en los diarios habaneros El Mundo y Revolución, en las revistas Humanismo y Cuadernos Americanos de México, y en Bohemia, Casa de Las Américas, Revolución y Cultura, La Gaceta de Cuba, Opus Habana y la Siempre Viva.
Es autor de “La Batalla en Ginebra”, Editora Política, La Habana, 1989; “ORCALC, cincuenta años de acción”, Unesco, La Habana, 2000; “Bolero y Otras Prosas, La Habana, 2000; “Roa x Roa”, editorial Capiro, Santa Clara, 2000; “En el Torrente”, Casa, 2004 (Premio Casa 1999, Mención en la categoría de testimonio); “Memoria de Mundos Varios”, Editorial Unión, La Habana, 2012. En preparación, Papelería de Raúl Roa.
Habla a la perfección cinco idiomas: español, inglés, francés, italiano y portugués, aunque antes también dominaba el checo y el ruso. Actualmente labora como asesor del Ministro de Comercio Exterior, Inversión Extranjera y Colaboración, con Rodrigo Malmierca.