Mario Limonta es un actor y locutor cubano. Premio Nacional del Humor 2016. “Pa’ que me respetes” y la asocian inmediatamente a Mario Limonta. Así le decía el Sargento Arencibia a su mujer en San Nicolás del Peladero. ¿Qué cubano no recuerda al guardia rural cómplice de Plutarco, con su uniforme militar, su voz gangosa, su tabaco y su actitud bravucona? Y es que Limonta se ha ganado a su público en sus casi siete décadas de vida artística, porque a cada personaje le pone empeño y corazón. La actuación y hacer reír han sido su vida.
Nació en Guantánamo. A los siete meses se mudó para La Habana porque su papá era tabaquero y le dieron un contrato en la capital. A los siete años le propusieron al padre ser copropietario en una pequeña fábrica de tabacos en Holguín. Allí vivió trece años. Así que es guantanamero- holguinero- habanero. Más habanero, porque en sus más de 80 años ha vivido 13 en oriente y el resto en la capital.
Su vinculación al arte comienza en su provincia natal, como declamador en la emisora radial. En 1955 terminó sus estudios de bachillerato y se trasladó a La Habana para estudiar derecho aunque sólo terminó el primer año. Ha contado que: “Realmente no me interesaba mucho esa profesión, la de abogado. Quería ser artista. A los 16 años empecé en la emisora CMKF en Holguín declamando versos. Recuerdo que era en un programa estelar que salía justo a las 7 de la noche. Lo auspiciaba La Época, una de las tiendas por departamentos en Holguín. Me pagaban 12 pesos con ropa. Cuando aquello un pantalón buenísimo valía seis pesos y pico. Me estrenaba con 16 años una pieza de ropa todos los meses y eso era un privilegio en esa época. Además, trabajaba en un cabaret que estaba frente al parque y allí, igual por recitar, me pagaban cinco pesos mensuales”.
Debutó en el programa de aficionados La corte suprema del arte donde alcanzó la categoría de Estrella Naciente. Este programa le dio “La posibilidad, primero, de conocer a Aurora Basnuevo. Fuimos dos años novios y nos casamos en el 60’. Además, la oportunidad de estar en el mundo de la CMK. Después de eso, al ser Estrella Naciente tuve nuevas oportunidades, establecí relaciones y empecé a ser mis cositas como actor“.
En 1959 comenzó a trabajar en el Circuito Nacional Cubano, hoy Radio Rebelde, en espacios dramáticos. Luego va al Teatro Nacional a estudiar académicamente artes escénicas. Tuvo de maestros a Adolfo de Luis, Julio Mata, Guido González del Valle e Iván Tenorio.
Hasta 1965 perteneció al grupo teatral Guernica del Teatro Nacional donde interpretó protagónicos en Bodas de sangre de García Lorca, Las impuras de Miguel de Carrión y Las vacas gordas de Abelardo Estorino.
En la televisión ha hecho una larga y exitosa carrera: El primer papel que hizo en ese medio fue un pequeño personaje en una aventura, luego ha actuado en teleteatros, comedias, aventuras y seriales. Su personaje del Sargento Arencibia en el programa San Nicolás del Peladero es muy recordado por el público. Recuerda con amor el personaje de: “Nacho Verdecia. Yo hice a Maceo, porque los Verdecia eran los Maceo, más allá de los detalles históricos. Los niños gritaban 'Viva Cuba libre', tenían machetes de palos. Todo gracias a ese personaje”.
En 1964 realiza su primer protagónico en el cine, en el filme La decisión dirigido por José Massip.
Mario Limonta ha declarado que el error más grande de su vida ha sido: “Beber. Yo estuve un tiempo bebiendo y me puse muy mal. En el Periodo Especial justamente. No es algo que oculto. Por suerte, desde el año 94’ suspendí por completo la bebida porque Titón iba a hacer una película que se llamaba Guantanamera y me citan para el casting. Habíamos terminado de hacer el filme De cierta manera, que protagonicé junto a Sara Gómez. La bebida me tenía liquidado, estaba flaco, al punto que le preguntaban a Aurora si estaba enfermo. Ese mismo día dejé de beber. 1994. La bebida casi termina con mi vida”.
Filmografía
La decisión. Dir. José Massip.1964 Asalto al tren central. Dir. Alejandro Saderman. 1967 De cierta manera. Dir. Sara Gómez. 1974 El Brigadista. Dir. Octavio Cortázar. 1977 Retrato de Teresa. Dir. Pastor Vega. 1979 Las profecías de Amanda. Dir. Pastor Vega. 1998 Miel para Oshún. Dir. Humberto Solás. 2001 Santa Camila de la Habana Vieja. Dir. Belkis Vega. 2002 Barrio Cuba. Dir. Humberto Solás. 2005 Mata, que Dios perdona. Dir. Ismael Perdomo. 2008 El cuerno de la abundancia. Dir. Juan Carlos Tabío. Los dioses rotos. Dir. Ernesto Daranas.
Premios y reconocimientos
Distinción por la Cultura Nacional, otorgada por el Consejo de Estado de la República de Cuba. Barrio Cuba. Premio al Mejor Actor de Reparto. 46 Festival de Cine de Cartagena, 2006. Lengua de Pájaro Mención especial en el concurso Caricato de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba. Miel para Oshún Premio Paoa al mejor actor de reparto. XIII Festival Internacional de Cine de Viña del Mar. Chile, 2001. Premio Nacional de Televisión 2009 Distinción Gitana Tropical 2012, otorgada por la Dirección Provincial de Cultura de La Habana. Premio Nacional del Humor 2016, por la obra de toda una vida