Cuba se despidió del Grand Slam de Osaka con una medalla de plata por cuenta de Idalys Ortiz (+78 kg), líder del ranking mundial y olímpico con 8940 y 6330 puntos, respectivamente.

La campeona de Londres 2012 cedió ante la medallista dorada del mundial de Tokio, la japonesa Akira Sone. Tras dos minutos del tiempo de oro, Sone aplicó la técnica o-uchi-gari que le valió punto por waza-ari.

Con este resultado, el enfrentamiento particular entre las número uno y dos del ranking marcha 1 – 3 favorable a la japonesa. Sin lugar a dudas esta rivalidad deparará un desafío mucho mayor para la cita estival del próximo año.

Previo al combate final, Ortiz había derrotado por ippon a Fanfan Liang (CHN), Tessie Savelkouls (NED) y Beatriz Souza (BRA), ubicadas en los puestos 92, 25 y siete del escalafón mundial respectivamente, tras quedar bye en la primera ronda.En 2019, la estelar judoca cubana conquistó la presea dorada en los torneos de Grand Slam de París y Dusseldorf, en el Grand Prix de Hohhot y Budapest y en los Juegos Panamericanos de Lima; además del segundo lugar en el Campeonato Mundial en Tokio, donde perdió ante Sone al recibir tres shido.

Su último evento de este año será el Másters de Qingdao, China, del 12 al 14 de diciembre, al que también asistirán por las damas Maylín del Toro (-63 kg) y Kaliema Antomarchi (-78 kg) y por los hombres Osniel Solís (-66 kg), Magdiel Estrada (- 73 kg), Iván Silva (-90 kg) y Andy Granda (+100 kg).