La pertiguista cubana Yarisley Silva realizó su mejor salto del año y terminó en el cuarto puesto en la más reciente parada de la Liga de Diamante.

La ciudad italiana de Roma acogió una competencia que contó con cuatro de las ocho finalistas de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y el Campeonato Mundial de Londres, y donde siete concursantes llegaron con registros históricos por encima de 4.80m. Entre ellas, Yarisley se las arregló para saltar 4.66m con menos fallos que sus contrarias.

La bronceada mundial de 2017 inició con fáciles 4.31 m en su primer intento, para luego superar los 4.46 m en su segunda oportunidad y volver a pasar sin problemas unos 4.56 m que significaban su mejor cuota del año. Más tarde, amplió ese registro con los definitivos 4.66 m logrados en la segunda tentativa.

La siguiente altura de 4.76 significó un escollo para casi todas, pues solo la sueca Angélica Bengsston logró pasarlos sin derribar la varilla. Ese rendimiento le sirvió no solo para llevarse su segundo triunfo consecutivo en la Liga del Diamante, sino también para implantar récord nacional de su país.

El segundo y tercer puesto correspondieron a la venezolana Robeilys Peinado y a la estadounidense Sandi Morris, mejores que Yarisley por menos cantidad de saltos nulos. En la prueba sorprendió la rápida eliminación de la estadounidense Jennifer Suhr, actual líder del escalafón mundial, pero incapaz de sobrepasar la varilla en 4.56m.

Aunque la marca conseguida por Yarisley todavía se mantiene lejos de los registros élites del momento, es una buena muestra de que la cubana avanza en su preparación. Como ella misma ha dicho en varias ocasiones, enfoca su trabajo paso a paso para acercarse a los registros deseados. En su caso, esa estrategia ya le ha rendido buenos frutos.