Regino
Pedroso
Aldama

Regino Pedroso Aldama
Nacimiento:  
5
/
4
/
1896
Fallecimiento:  
7
/
12
/
1983

Poeta vanguardista cubano, iniciador de la poesía social en la Isla.

Nació en Unión de Reyes, municipio de la provincia cubana de Matanzas. Cursó la primera enseñanza en diversas escuelas públicas y abandonó los estudios a los trece años de edad. Trabajó como aprendiz de carpintería, en diversas labores agrícolas, en una fundición de acero y en un taller ferroviario. Fue miembro de Pro Unidad, el sector de militancia más radical dentro de la Hermandad Ferroviaria de Cuba.

Desde 1919, comenzaron a aparecer sus primeros poemas en publicaciones periódicas de una importante circulación como El Fígaro, Castalia y Chic. En 1927, el suplemento literario del Diario de la Marina, publicó su poema “Salutación fraterna al taller mecánico”, con el que se inició en Cuba la poesía social de orientación clasista. En 1930, después de haber quedado cesante en el taller ferroviario, trabajó en la redacción de La Prensa, y fue redactor en Ahora, y corrector de pruebas en La Palabra. Ese mismo año 1930, se publicó su primer libro, Nosotros.

Colaboraciones suyas aparecen también en revistas y periódicos como Bohemia, Social, Revista de Avance, Carteles, El Mundo, El País, Unión y Anuario L/L; New Masses, The Survey Graphic, Opportunity, The West Indian Review, Poetry Quarterly (norteamericanas) y Le Journal des Poètes (belga). Formó parte del consejo de dirección de la revista Masas, órgano de la Liga Antiimperialista de Cuba. En 1935, fue condenado a seis meses de prisión, conjuntamente con los demás integrantes de la dirección de Masas, por sus actividades antiimperialistas. Militó en Defensa Obrera Internacional. Hasta 1959, trabajó en la Dirección de Cultura del Ministerio de Educación. Después del triunfo revolucionario, fue consejero cultural de Cuba en la República Popular China y en México. Viajó por Europa y el norte de África.

En 1939, obtuvo el premio nacional de poesía por su libro Más allá canta el mar. Ese mismo año apareció publicada su Antología poética (1918-1938). En 1955, publicó el libro de versos El ciruelo de Yuan Pei Fu, en el que rinde homenaje a sus ancestros chinos.

Es autor de cuentos y del ensayo “Rubén Martínez Villena: el poeta y el hombre”. Sus poemas han sido traducidos al inglés, francés, portugués, ruso, chino, checo, italiano, alemán, búlgaro, rumano y yidish. En 1975, se reunió toda su poesía en Obra poética, con un estudio introductorio de Félix Pita Rodríguez. Falleció en La Habana el 7 de diciembre de 1983.

La obra de Regino Pedroso es representativa del vanguardismo cubano de la década de 1930 y su obra inició plenamente una de las tres direcciones principales (además de la poesía pura y la poesía negra) en que se expresaría este movimiento: la poesía social, en la que también se destacarían figuras de la talla de Nicolás Guillén y Manuel Navarro Luna.

El vanguardismo cubano se caracterizó por el abandono de los moldes estróficos, de rima y de medida; la disposición tipográfica alterada, y el papel preponderante de la metáfora. Reuniendo de modo sorpresivo entidades lógicamente irreconciliables, o usando con carácter inusitado diferentes partes de la oración, la vanguardia estableció una variedad considerable de metáforas de sello propio con las que se proponía expresar los nuevos y convulsos tiempos.

Con el poema "Salutación fraterna al taller mecánico", publicado en 1927, Pedroso inició la poesía de corte social e intensión política, desde un enfoque y con el espíritu propios de la estética vanguardista. En Nosotros (1933), que incluiría aquel poema inaugural, Pedroso dio cauce a sus ideas socialistas. Con encendido acento, cantó al trabajador manual en una obra legítima no sólo por su abierto interés militante, sino porque el poeta era entonces un proletario. Nosotros fue considerado por Juan Marinello como “la más robusta contribución de poesía social dada en Cuba”.

Como le sucedió a la mayoría de los poetas de su generación, en su obra posterior Pedroso fue embridando y puliendo su expresión, hasta alcanzar, con El ciruelo de Yuan Pei Fu (1955), uno de los hitos de la poesía cubana del siglo XX. Alejado del tono abiertamente militante, este libro parece resumir el tono, entre desencantado y filosófico, que asumió el poeta tras la convulsa década de 1930. Entre sus poemas antológicos, figuran "Five O'Clock Tea", "Canción de los barcos náufragos", y "Yuan Pei Fu despide a su discípulo".

Félix Pita Rodríguez ha afirmado que “por haber sabido recoger las inquietudes y las esperanzas de su época, y por haber sido capaz de construir con ellas la armoniosa arquitectura poética de su obra, Regino Pedroso alcanza las cimas de lo artísticamente perfecto”.

Bibliografía activa
Nosotros, poemas, Editorial Trópico, La Habana, 1933.
Antología poética (1918-1938), Imp. Molina, La Habana, 1939.
Más allá canta el mar..., poema, Imp. La Verónica, La Habana, 1939.
Bolívar, sinfonía de libertad, poema, P. Fernández, La Habana, 1945.
El ciruelo de Yuan Pei-Fu, poemas chinos, P. Fernández, La Habana, 1955.
Poemas, antología, prólogo de Nicolás Guillén, Eds. Unión, La Habana, 1966.
Obra poética, prólogo de Félix Pita Rodríguez: “Regino Pedroso y la nueva poesía cubana”, Editorial Arte y Literatura, La Habana, 1975.

Fuente: En Caribe.org