Eduardo
Paret
Pérez

Eduardo Paret Pérez
Nacimiento:  
23
/
9
/
1972

Nació en el reparto Condado de la ciudad de Santa Clara

Comienza en la Serie Nacional 1989-1990 en la que como heredero de su ídolo y profesor Pedro Jova compiló para astronómico 366 con apenas 17 años de edad.

No demostraba excepcionales dotes a la defensa, pero gracias a su dedicación y la ayuda de sus entrenadores en especial de Pedro Jova, su manager entre 1992 y 1997, hicieron que ya a partir de 1993 se codeara de tú a tú con la gran estrella de esa posición

Entre otros fue eje fundamental de los tres títulos y dos subtítulos al hilo conseguidos por Villa Clara bajo la dirección de Jova.

Rendimientos
Entre 1993-1996 tuvo rendimientos integralmente superiores a Germán Mesa, que le posibilitó integrar ininterrumpidamente el Team Cuba desde los Centroamericanos celebrados en Puerto Rico en 1993. Sin embargo, debió ver los juegos desde la banca en la mayoría de las ocasiones en que coincidió con Germán, no solo por ser este el indiscutible titular de la posición, sino también gracias a la injusta terquedad de los técnicos de dejar la alineación regular de Cuba en casi todo momento sin importar que el marcador reflejara una ventaja abultada a favor de los criollos, algo bien común en esa época.

Paret en la Selección Cubana
Internacionalmente dió tempranas dotes que hizo adivinar a una futura estrella en el Campeonato Mundial Juvenil celebrado en La Habana en 1990. En dicha cita mundialista fue elegido como el torpedero del Todos Estrellas y el Más Valioso por terminar entre los primeros bateadores y encabezar las comparecencias, veces al bate, carreras anotadas, hits, triples y bases robadas.

En el Mundial de China Taipei, en el 2001, regresa a la Selección Nacional en condición de regular del campo corto por encima de Germán Mesa, pero se notaba errático a la defensa hizo tres errores en pocos lances, los únicos que cometió en Campeonatos Mundiales, Olimpiadas, Clásicos Mundiales y Copas Intercontinentales y también a la ofensiva.

Al concluir el Mundial supimos por un entrenador miembro del cuerpo de dirección del equipo que Paret jugó bajo mucha presión, de un lado las habituales y naturales ofertas para que jugara en el béisbol profesional, de otro; la derivada de funcionarios de la delegación cubana que lo chequeaban constantemente para evitar una posible deserción e hicieron que el mencionado entrenador no se separara de él un instante, así como el rigor propio de la competencia después de varios años sin jugar en eventos internacionales de importancia y el pleno conocimiento que debía hacerlo bien, pues tenía a un astro como Germán en la banca cubana.

Pero Paret demostró su clase estelar a partir de ese amargo momento y se erigió como el indiscutido número uno del short stop cubano e integró todos los equipos nacionales desde esa fecha hasta el II Clásico Mundial de Béisbol. Desde el 2005 fue el capitán del Team Cuba. En el 2005 fue elegido como el mejor pelotero del Mundo por la IBAF gracias en gran medida a su gran rendimiento en el Campeonato Mundial celebrado ese año en que fue el mejor torpedero y el Más Valioso.

Regreso al País
A partir del 2006 comenzó a declinar su rendimiento en el aspecto ofensivo y en la velocidad, aunque no la potencia de su brazo y calidad defensiva.

En la Serie Nacional 2008-2009 apenas jugó una veintena de partidos, pues recibió permiso para acogerse a un tratamiento de fertilidad junto a su esposa, proceso que se ha extendido hasta el 2010 y que ha hecho que no haya podido jugar hasta el Play Off de la Zona Oriental entre Los Naranjas y Las Avispas de Santiago de Cuba.

Su regreso no pudo ser mejor, instantes después de haberse situado a la defensa y realizó dos joyas defensivas en batazos por encima de almohadilla de segunda que hicieron delirar a la afición. Uno de sus engarces prodigiosos sirvió para impedir un hit al jardín central de Héctor Olivera Jr.

A la ofensiva vino a batear en medio del caluroso recibimiento de su público y dio línea de hit que dos carreras, se coló con el tiro del jardinero en segunda base y minutos después anotó otra. Cuando ancló en segunda el torpedero Luis M. Navas como y el segunda base Héctor Olivera, acudieron en gesto deportivo a abrazar a quien ha sido un ejemplo como pelotero y persona.

De no ser por su ausencia de la pelota cubana en las dos últimas temporadas tendría mejores números de los que ya tiene en el béisbol de Series Nacionales. Esta entre los primeros en casi todos los departamentos ofensivos con excepción de los jonrones, impulsadas y average. También está entre los primeros en lances, asistencias, doble plays, innings y partidos jugados.

Con el equipo principal de Cuba debuta en los Juegos Centroamericanos celebrados en Puerto Rico en 1993. Para el año 1996 sería el titular del campo corto durante los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 donde bateó para .375 de average y no cometió errores a la defensa, Cuba y Paret se proclamarían campeones olímpicos en esa cita.

En 1997 deja de integrar la selección nacional debido a una suspensión impuesta por las autoridades del beisbol cubano, provocando la ausencia de Paret por cuatro años de Equipo Cuba. Su retorno a la selección sería en el 2001 durante la Copa del Mundo celebrada en Taipéi de China en la que Cuba se alzaría con el título tras derrotar en la final a Estados Unidos.

Paret volvería a coronarse en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, ganando posteriormente su tercera medalla olímpica, esta vez de plata, en Beijing 2008. Igualmente fue titular del campo corto en el Primer Clásico Mundial de béisbol, alcanzando el segundo puesto, al caer en la final contra Japón.

En resumen Paret participó en 3 Juegos Olímpicos (2 medallas de oro y 1 de plata), 2 Clásicos Mundiales (medalla de plata en el 2006),6 Campeonatos Mundiales de la IBAF (4 medallas de oro y 2 de plata), 3 Juegos Panamericanos (3 títulos) y 3 Juegos Centroamericanos y del Caribe (3 títulos).

En el año 2011 Paret anuncia su retiro como jugador y pasará a entrenar a otros peloteros